Capilla de la comunión
La Capilla de la Comunión fue construida en 1709 y ampliada en 1895. Está adosada a la nave central de la parroquia por el lado del evangelio. La Capilla de la Comunión fue totalmente restaurada entre 1984 y 1987, de ahí la notable diferencia de conservación respecto a la nave central de la parroquia.
La puerta principal de la Capilla está situada en la Plaza de la Vila. Tras ella hay un cancel del mismo estilo y de la misma época que los otros dos existentes en la iglesia. Es de madera y está decorado con símbolos de la letanía lauretana: la fuente, el arca, la palmera y el ciprés. Sobre el cancel hay una vidriera semicircular con un motivo mariano.
En la pared lateral derecha tenemos la puerta que da acceso a la Capilla desde la nave central de la Iglesia. A su lado derecho hay una pequeña pila de mármol . Sobre ella, podemos ver una lápida conmemorativa del título concedido por S.M. el Rey D. Alfonso XIII en 1930 de Capilla Real. En la parte
izquierda de la puerta podemos observar otra placa de mármol conmemorativa de la Declaración Canónica de la Virgen del Remedio como Patrona de Albaida por el Papa León XIII el 9 de mayo de 1899.
Sobre las paredes laterales podemos observar un lienzo de la Virgen del Remedio de Fray Antonio Villanueva pintado en el siglo XVIII como bocaporte de la hornacina donde se encuentra la imagen y los lienzos de José Segrelles “San Juan Bosco” (1950) “Santa Rosa de Lima” (1951) y "San Francisco de Asís” (1951). También hay un óleo sobre tabla del siglo XVII de “El Salvador”.
El techo de la Capilla constituye un bello conjunto de relieves iconográficos referentes a las Sagradas Escrituras. Está hecho de escayola y data del año 1845. En él hay tres partes claramente diferenciadas con cuatro escenas cada una. En la primera parte, la más cercana a la puerta, podemos distinguir a cuatro mujeres bíblicas que precedieron a la Virgen María: Rebeca junto al pozo de Jacob, Rut la espigadora, la reina Ester y el rey Asuero, y Judit junto al lecho del general en jefe Holofernes.
En la parte central podemos observar cuatro capítulos distintos de la vida de la Virgen María: la Anunciación del ángel Gabriel, los Desposorios con José, la visita a su prima Isabel y la Presentación de Jesús en el Templo. En la tercera parte, junto al presbiterio vemos cuatro imágenes alegóricas a la Eucaristía: los panes de la proposición que se ofrecían en el Templo, el Ave Fénix que renace de las cenizas, el Cordero de Dios y el Arca de la Alianza.
En el Camarín (1770) enmarcado por dos columnas se venera la imagen de la Virgen del Remedio, Patrona de Albaida, con el Niño en brazos. Es una escultura de madera policromada adaptada para ser vestida realizada por Juan Bautista Balaguer en 1740. La corona y la aureola son de plata. La
Virgen está representada de pie y descansa sobre un trono de nubes, ángeles y serafines realizado por Enrique Galarza en 1942. En la mano derecha la Virgen lleva una rama de olivo de plata que nos recuerda constantemente que ella vela por los albaidenses desde que los librara de aquella plaga que hizo que la
proclamaran Patrona de la Ciudad.
Bajo la imagen de la Virgen se encuentra el Sagrario. La puerta del Sagrario está cubierta con un óleo sobre lienzo que representa a Jesús ofreciendo el pan de la eucaristía y que pintó José Segrelles en 1944. Ante él todos los días del año prende un velón sobre un portalámparas indicando que aquí se encuentra la presencia real de Jesucristo en el Santísimo Sacramento.
A ambos lados se encuentran las imágenes de San José y de San Pedro Apóstol realizadas en madera policromada en el siglo XVII.
